Después de rezar el Ángelus desde la ventana del Palacio Apostólico, el Papa Francisco hizo un llamado a la paz en Nicaragua y recordó que “la Iglesia está siempre por el diálogo”. añadió que se une a los obispos de Nicaragua "para expresar dolor por los graves actos de violencia, con muertos y heridos, llevados a cabo por grupos armados para reprimir las protestas sociales”.

“Rezo por las víctimas y por sus familias”, dijo el Papa que afirmó que “la Iglesia está siempre por el diálogo, pero esto requiere el compromiso activo a respetar la libertad y antes de todo, la vida”. finalmente añadió que reza porque "cese toda violencia y se aseguren las condiciones para que se retome el diálogo lo antes posible”.

Informe de la CIDH

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió al gobierno de Nicaragua desmantelar las estructuras represivas parapoliciales, sancionar el uso de la fuerza de estos grupos y respetar el derecho a la protesta pacífica.

"La CIDH insta al Estado a investigar y sancionar el uso de la fuerza por parte de actores parapoliciales, desmantelar dichos grupos y buscar una solución pacífica, constitucional y democrática a la actual crisis política que afecta al país", dice el comunicado.

"Es una obligación del Estado de Nicaragua desmantelar las estructuras represivas que están actuando en el país, las cuales deben ser investigadas y sometidas a la justicia, así como recuperar el uso legítimo y proporcional de la fuerza, en el marco del Estado de Derecho”, añade el texto.

El organismo denuncia que en la marcha pacífica de apoyo a las Madres de Abril, que se realizó el 30 de mayo, fallecieron 15 personas y 199 resultaron heridas en Managua, Estelí y Masaya. También consigna que se realizaron ataques a medios de comunicación y periodistas que cubrían los incidentes.

El secretario ejecutivo de la CIDH, Paulo Abrão, señaló que "el Estado debe facilitar la realización de manifestaciones como un elemento fundamental del funcionamiento de la sociedad democrática y hacer uso excepcional de la fuerza, con el objetivo de cumplir con el deber de protección de las personas".

El conflcto

Las protestas en Nicaragua comenzaron en abril, universitarios reclamaron por el incendio en la reserva biológica Indio Maíz que duró 10 días, y acusaron al Estado por ser negligentes en combatir el siniestro. Las movilizaciones se intensificaron a raíz de la reforma al Seguro Social. Entonces, el presidente Daniel Ortega, ordenó el despliegue del Ejército y comenzaron las represalias.

Finalmente, el Gobierno eliminó la ley, pero los disturbios continuan, a pesar de los intentos de diálogo auspiciados por la Iglesia católica.

Hasta el momento, la CIDH  reporta 97 personas muertas en las protestas; sin embargo, según el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) hay 108 muertos y cerca de un millar de heridos.