Un mayor nivel de estudios no significa que se alcanzará mayor inserción laboral para los jóvenes de la ciudad de El Alto, según una investigación del Centro de Estudios para el desarrollo laboral y agrario (Cedla). 

De los jóvenes con educación superior, universitaria o técnica, sólo el 40% participa en el mercado laboral, de los bachilleres, el 53% y de los que tienen una educación primaria o menor el 58% trabaja. 

El informe mantiene que el porcentaje general de desempleo juvenil es de 13%. El desempleo en jóvenes varones es de 7,8% y el de mujeres es de 19,6%. Sin embargo, las cifras son más altas en el caso de las mujeres con educación superior, cuyo nivel de desempleo sube a 27,3%, mientras que el de los hombres baja a 4,8%.

Esto se debe a que la oferta laboral de trabajos no especializados o de baja calificación es mayor. Las vacantes evidenciadas en el estudio son de 41,8% en trabajos no calificados, 35,7% en operación de maquinaria, 28,6% en industria estractiva y construcción, 13,8% en comercio, y solamente 12,8 % en ocupaciones técnicas y profesionales de apoyo y 4,3 % en oficinas.

Asimismo, el informe muestra que sí existen políticas de promoción de la oferta laboral, ya que el 64,5% de las empresas las tiene; sin embargo, sólo el 35,% tienen políticas de permanencia en el trabajo. Esto explica el hecho de que el 73% de los desempleados sean cesantes, es decir, personas que desean suplir el empleo que perdieron.

El informe explica que 6 de cada 10 jóvenes trabajadores han iniciado su vida laboral antes de los quince años, simultáneamente con los estudios. Además,  uno de cada diez jóvenes no estudia ni trabaja, lo que representa cerca de 20 820 personas. Estos jóvennes pertenecen a clases medias y mayormente son mujeres que a falta de trabajo se han refugiado en trabajos del hogar.

Según las proyecciones del Instituto Nacional de Estadística (INE) para el 2016, en Bolivia actualmente hay dos millones seiscientos diez mil jóvenes, de los cuáles 646 mil están en el departamento de La Paz, convirtiendose en el segundo del país con mayor cantidad de personas entre 16 y 28 años. De ellos 62,2% alcanzaron la educación secundaria, el 27,2% la educación superior, el 9,7% la educación primaria y el 0,8% no participaron de la educación formal.