Los de Zidane saben que el encuentro de esta noche no va a ser nada fácil. A pesar de que parten con el marcador global a favor y de que juegan en casa, los blancos no se fían de un conjunto alemán capaz de todo.

Buena parte de ese respeto merengue se llama Lewandowski. El delantero polaco se perdió por lesión el partido de ida de los cuartos de final de la Champions, pero hoy estará en el césped del Bernabéu. Ya está recuperado de su lesión en el hombro o al menos eso parece, pero esté como esté jugará. Contar con su mejor delantero es una gran baza para los alemanes, pero si en ataque van a mejorar muchísimo con respecto a la ida, en defensa es todo lo contrario. Ancelotti no puede contar con Javi Martínez, expulsado en Múnich, y tiene las dudas de Boateng y Hummels, con molestias.

A pesar de todo, el Bayern tiene claro que lo debe dar todo en el Bernabéu para eliminar a un Real Madrid en el que Zidane parece que apostará por Isco para sustituir al lesionado Bale. El andaluz llega al encuentro con la moral por las nubes tras su partidazo en Gijón y si Zidane no lo pone de titular sería una gran sorpresa y, sin duda, un golpe anímico para el jugador. Con Isco en el campo, el Madrid parece que jugará con un 4-4-2 con Benzema y Cristiano arriba y un rombo formando el centro del campo con Casemiro como mediocentro y e Isco actuando por detrás de los dos delanteros, su posición preferida.