Así, desde Matías Dituro, pasando por Mauricio Prieto, Leonel Justiniano, Gastón Sirino, Juan Carlos Arce y especialmente Ronnie Fernández, han llamado la atención por el rendimiento que han tenido en este último semestre en Bolívar. Por eso, el domingo anterior, el Presidente de Baisa SRL, Marcelo Claure, se animó a mencionar que hay buenas propuestas para dos de los jugadores celestes y que por uno en especial, hay marcado interés en una transacción que podría implicar un monto de dinero que nunca se había manejado en el fútbol nacional. 
Ningún dirigente quiso confirmar la situación, porque se entiende que es el mandamás de Baisa el encargado de llevar las negociaciones. Pero, es probable que el atacante chileno Ronnie Fernández, hoy por hoy, sea el jugador celeste más cotizado. 

No solo Fernández ha despertado interés, sino también el uruguayo Gastón Sirino, quien con sus doce goles y con pocos minutos de juego, porque salvo los últimos partidos, no tuvo oportunidad de jugar los noventa minutos. También el golero Matías Dituro, ni qué decir de Juan Carlos Arce y Leonel Justiniano, otros dos que llaman la atención en el exterior. Pero, en Bolívar, salvo uno o dos, no se va nadie más.

Pero el final del torneo apertura también conlleva la salida de otros que no tuvieron rodaje en filas del Campeón; el partido de Bolívar ante Oriente Petrolero, a jugarse este miércoles, será el último que dispute Romel Quiñónez en filas de Bolívar, por al menos los próximos seis meses. Por Quiñónez hay interés de tres clubes: Oriente Petrolero, Sport Boys y Wilstermann, clubes que han conversado con la dirigencia celeste para pedir algunas condiciones. 

Otro que abandonará Tembladerani es el golero tarijeño Diego Zamora; de igual manera se habla insistentemente de la partida del paraguayo naturalizado boliviano Nelson Cabrera por el que se escucharán ofertas, pero hasta el momento no hay nada concreto del exterior. Paralelamente, se analizan los casos de Edemir Rodríguez, Walter Flores, Juan Eduardo Fierro, Leonel Morales, quienes culminarán sus contratos con Bolívar. Es probable que la mayoría se quede, salvo alguna determinación de último momento.