La Defensoría del Pueblo anunció la habilitación de una línea telefónica para brindar asistencia, psicológica, legal, entre otras, a víctimas de pederastia por parte de sacerdotes y otros miembros de la Iglesia.

“La Defensoría del Pueblo ha invitado públicamente a las víctimas de estos casos de pederastia, puedan apersonarse a nuestra institución para que le brindemos contención profesional, si así lo requieren, hagamos un seguimiento al proceso penal abierto y busquemos un ámbito de reparación integral”, manifestó el defensor del  pueblo, Pedro Callisaya.

Según información oficial, la Defensoría habilitó la línea gratuita 800 10 8004 y el número de WhatsApp 72006607 para tal efecto.

Callisaya aseguró que cualquier denuncia se tratará en el ámbito de la estricta confidencialidad, se aplicaran mecanismos de contención por parte de profesionales, si así lo requieran los denunciantes, además del debido acompañamiento para buscar una reparación integral por el daño sufrido.

Por otro lado, el Defensor del Pueblo informó también que esa institución ya recibió el informe de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) sobre los casos de pederastia y aguarda la respuesta del Arzobispado de Cochabamba. Remarcó que se encuentra en la labor de recabar más datos para poder dimensionar este suceso.

 “Por la naturaleza del caso, la vulneración de derechos y la recurrencia con la cual se hubiesen suscitado estos hechos, obliga a que la Defensoría del Pueblo pueda intervenir, particularmente en cuanto a las víctimas”, aseguró la autoridad.

El 30 de abril se publicó una investigación en el periódico El País de España sobre el jesuita Alfonso Pedrajas que reveló el abuso sexual de al menos 85 niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad, la mayoría en Bolivia y que fue encubierto por la Iglesia.

Tras difundirse el escandaloso caso, se conoció en Bolivia que otros sacerdotes de la Compañía de Jesús también abusaron de menores.