La fiscal venezolana Luisa Ortega se encuentra bajo protección del Gobierno colombiano, que está dispuesto a concederle el asilo si ella lo solicita, anunció el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, a través de su cuenta en Twitter.

Es la primera comunicación oficial desde que Ortega arribó a Colombia el 18 de agosto en un avión privado proveniente de Aruba, a donde había viajado desde la península venezolana de Paraguaná en una lancha rápida junto con su esposo, el diputado Germán Ferrer, que tiene una orden de captura emitida por el Tribunal Supermo de Justicia, por una denuncia del constituyente Diosdado Cabello que aseguró había abierto una cuenta bancaria cifrada en Bahamas.

Ortega apoyó el chavismo, pero comenzó el conflicto con el Gobierno de Maduro al declarar un "quiebre constitucional" luego de que el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) adoptó las funciones de la Asamblea Nacional.

Ortega fue destituida el 5 de agosto por la Asamblea Nacional Constituyente de Venezuela, que la acusó de haber cometido "actos inmorales".

El 17 de agosto, su reemplazo, Tarek William Saab, la acusó de ser "la autora intelectual de cada uno de los muertos y heridos que ocurrió a partir del 1 de abril", en protestas en las que han muerto al menos 120 personas.

El 18 de agosto acusó a Maduro de estar involucrado en el escándalo de Odebrecht. "Todo esto tiene que ver con la investigación del caso Odebrecht, el caso del mayor hecho de corrupción en la región, eso los tiene muy preocupados y angustiados", dijo en una videoconferencia con la Cumbre de Procuradores y Fiscales de América Latina celebrada en la ciudad de Puebla, México.

El 20 de agosto, el presidente Nicolás Maduro denunció que Ortega bloqueó investigaciones de supuestos casos de corrupción, y que su esposo "era el encargado de una red de extorsión" que funcionaba en el Ministerio Público.