Paz: “Estamos poniendo en su lugar a quienes le robaron al país”
El expresidente Luis Arce fue enviado a la cárcel de San Pedro con detención preventiva el pasado viernes acusado de los delitos de conducta antieconómica e incumplimiento de deberes en el caso Fondo Indígena.

Horas después de que el expresidente Luis Arce fuera enviado a la cárcel de San pedro con detención preventiva, el actual jefe de Estado, Rodrigo Paz, afirmó que todas las personas que “robaron” y quisieron dejar a Bolivia sin destino “deberán pagar sus penas” y el “Estado los va a poner en su lugar”.
“Hoy, Bolivia no pelea una guerra externa, pero enfrenta inseguridad, crimen organizado, transaccional, fronteras vulnerables, contrabando, corrupción, desconfianza social, eso es lo que nos han dejado, eso tenemos que revertir. Lo estamos haciendo, poniendo en su lugar a aquellos que nos robaron y vamos a luchar con firmeza para recuperar la Patria”, sostuvo el mandatario durante su discurso en el acto de egreso de cadetes y alféreces del Ejército, la Fuerza Aérea y la Armada Boliviana.
Y agregó: “Aquellos que nos robaron y nos quisieron dejar sin destino, ya están viendo dónde los estamos poniendo, tendrán que cumplir sus penas, sus agravios”.
Según Paz, ni siquiera dejaron recursos para atender los desastres naturales, pero afirmó que de todas maneras se harán todos los esfuerzos para cubrir las necesidades.
Arce fue enviado a la cárcel de San Pedro con detención preventiva el pasado viernes acusado de los delitos de conducta antieconómica e incumplimiento de deberes en el caso Fondo Indígena.
El juez anticorrupción Elmer Laura determinó la extrema medida después de que la Fiscalía justificara que existen riesgos de fuga y obstaculización de las investigaciones.
En la audiencia, la defensa del expresidente pidió medidas sustitutivas alegando que Arce es una persona de la tercera edad y que padece la enfermedad del cáncer. Además, se justificó que tiene un domicilio conocido y trabaja dando clases en la Universidad Mayor de San Andrés.
Asimismo, el propio Arce tomó la palabra y aseguró ser “absolutamente inocente” de las acusaciones en su contra, además de acusar al Gobierno de usarlo como “chivo expiatorio” para tapar la “coyuntura” que se vive en el país.
“Esta demás decir que soy absolutamente inocente de las acusaciones que alegremente se están vertiendo con aspectos claramente políticos, por la coyuntura política que atraviesa el Gobierno. Busca chivos expiatorios para cubrir lo que está pasando”, aseveró Arce ante el juez, en una audiencia virtual.
Sobre el caso concreto, en el que se le investiga debido a que, en su calidad de ministro “aprobó los desembolsos a cuentas particulares sobre proyectos que no han llegado a su conclusión”, Arce afirmó que nunca actuó a título personal ni presencial.
Señaló que no participó en el 99% de las reuniones referidas al Fondo Indígena, con excepción de una que se desarrolló en Tarija y cuya acta, aseguró, nunca conoció.
Además, aseveró que delegaba la representación del Ministerio a distintos funcionarios para participar de las reuniones.
“No es la persona la que participa del directorio, sino que es el ministerio como tal”, aseveró.
Entretanto, el fiscal asignado al caso, Miguel Cardozo, explicó que Arce es investigado por su accionar de cuando era Ministro de Economía, durante el Gobierno de Evo Morales.
“En la presente investigación se tiene responsabilidad del señor Luis Arce en su calidad de ministro, ya que es el que ha financiado, el que ha ejecutado y el que ha aprobado los desembolsos a cuentas particulares sobre proyectos que no han llegado a su conclusión”, informó.
El Fiscal, no obstante, admitió que no es un delito el aprobar desembolsos a cuentas privadas, “pero sí tiene la obligación en el Ministerio de Economía de verificar que la transferencia cumpla con lo que se ha solicitado”.
En ese sentido, aseveró que al expresidente no realizó el seguimiento de la ejecución de los proyectos del Fondo Indígena.
El Fondo Indígena fue objeto de polémica desde 2015, cuando se revelaron listas de proyectos que fueron inconclusos y para los cuales se había desembolsado dinero a dirigentes de organizaciones sociales.
