El ministro de Trabajo, Édgar Morales, informó que el Gobierno evaluará el comportamiento del turismo y el movimiento económico generado durante este reciente feriado ampliado de Navidad (25 y 26 de diciembre) para decidir si se adopta una medida similar en el feriado de Año Nuevo.

Aunque el Decreto Supremo 5506 fue concebido para regir por única vez, la posibilidad de extender el descanso de fin de año está sujeta a que los datos demuestren que este tipo de pausas laborales se traducen en un éxito para las familias y los emprendedores locales.

Esta evaluación no es aislada, explicó, sino que forma parte de una ambiciosa estrategia nacional denominada 200 Años, 200 Destinos.

El viceministro de Turismo, Andrés Aramayo, indicó, en entrevista con el periódico Ahora el Pueblo, que el objetivo de la medida es buscar una redistribución equilibrada del flujo turístico, alejándose de la saturación de los destinos tradicionales para dar luz a rincones que atesoran una riqueza cultural y natural incalculable.

Este tipo de turismo, además de alimentar el espíritu, aporta directamente a la economía nacional, permitiendo que la riqueza se democratice y llegue a las comunidades que guardan la esencia de identidad nacional, explicó.