El ministro de Gobierno, Carlos Romero, admitió hoy que la corrupción “es un mal que está afectando a la Policía boliviana”, durante el cierre de la IX Cumbre de Seguridad Ciudadana que se desarrolló durante esta jornada.

La autoridad, en ese sentido, señaló que en este momento la Policía boliviana está afrontando el “reto histórico” de asumir y lograr “profundas transformaciones” a raíz de “los muchos problemas que se han presentado” en esa institución del orden.

De hecho, Romero señaló que, por eso, hoy se definieron 15 propuestas para lograr la transformación estructural de la policía boliviana.

El mensaje de Romero llega después de que se descubriera varios hechos de corrupción dentro de la Policía boliviana, como sobornos para la definición de destinos o la corrupción en los exámenes de ingreso a la Academia Nacional de Policías.

El más reciente y, quizás, más grande fue el que involucra a exjefes policiales con el supuesto narcotraficante Pedro Montenegro Paz.