Bolivia redujo, entre el 2017 y el 2018, en un 6% los cultivos de coca a nivel nacional, según el “Informe de monitoreo de cultivos de coca 2018” que fue presentado hoy por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC).

Según los datos de la UNODC, el país pasó de tener 24.500 hectáreas de coca el 2017 a tener 23.100 el 2018, lo que significa un decremento de 1.400 hectáreas.

El representante de la Oficina País de la UNODC en Bolivia, Thierry Rostan, aseguró, en ese sentido, que "es una buena señal que este año se haya producido una reducción de la superficie de hoja de coca".

Rostan detalló que el 65% de la superficie total de los cultivos de coca en el país están ubicados en Los Yungas de La Paz; y el 34% están en el Trópico de Cochabamba. En ese sentido, señaló que en Los Yungas de La Paz, entre el 2017 y el 2018, presentó un decremento del 6% en los cultivos de coca, pasó de tener 15.900 hectáreas el 2017 a tener 15.015 el 2018.

En cambio, la disminución de los cultivos de coca en el Trópico cochabambino fue de un 7%: pasó de tener 8.400 hectáreas de coca el 2017 a 7.784 el 2018.

Rostan, por otro lado, también destacó que a nivel municipal el mayor decremento de los cultivos de coca se registraron en La Asunta, en la región de Los Yungas de La Paz. Explicó que en la Asunta se pasó de tener 6.647 hectáreas de coca el 2017 a tener 5.681 el 2018.

No obstante, señaló que el municipio paceño de Apolo es donde más se incrementaron los cultivos de coca y alertó que “por primera vez” se identificaron hectáreas de coca en el municipio Abel Iturralde de La Paz. De hecho, según el informe de la UNODC hubo un incremento del 57% en el norte paceño.