Después de que el helicóptero presidencial sufriera una “falla mecánica” que obligó a un aterrizaje de emergencia, con el presidente Evo Morales a bordo, autoridades y militantes del Movimiento al Socialismo (MAS) solicitaron a las Fuerza Aérea Boliviana  (FAB) una “profunda investigación” para determinar las causas del hecho.

El exministro de la Presidencia, René Martínez, dijo “como boliviano y militante del Proceso de Cambio” pido a la FAB “absoluta celeridad y profesionalismo en la investigación sobre el accidente que puso en riesgo la vida de nuestro presidente Evo Morales”.

“El país necesita despejar cualquier duda sobre este hecho”, agregó.

En esa misma línea, las diputadas del MAS, Susana Rivero y Valeria Silva, por separado, señalaron que el presidente se encuentra bien tras el hecho y que se harán las investigaciones correspondientes.

"El presidente Evo Morales está bien, ahora mismo sosteniendo reuniones con diferentes sectores sociales. Lo del helicóptero fue un incidente debido a falla técnica que será investigada por la FAB. Evo es un hombre fuerte y valiente, cualidad no muy usual en presidentes de Bolivia”, señaló Silva a través de su cuenta de Twitter.

No obstante, también hubo autoridades y exautoridades que dieron a conocer sus sospechas respecto a que el incidente es parte de un atentado contra la vida del Primer Mandatario. El primero en reaccionar en esa línea fue el  exministro de Gobierno Hugo Moldiz, que calificó el hecho como un “atentado criminal”.

“La ultraderecha vestida de org. Cívicas retoma el camino de la violencia, como ya lo hizo en 2008-09. Esto es lo que esperaba Luis Fernando Camacho? Pero no hay nada que el pueblo no derrote con su lucha” (sic), agregó.

En esa misma línea, el concejal de La Paz por el MAS, Jorge Silva, señaló que el hecho fue un atentado ya que el helicóptero en cuestión es “nuevo” y apuntó como posibles responsables a políticos y dirigentes de comités cívicos.