El viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilson Santamaría, justificó los operativos policiales que se realizan en cercanías de las residencias diplomáticas mexicanas - así como en el resto del país- y advirtió que el Gobierno no permitirá que México ayude a que exautoridades bolivianas que están en su embajada y tienen orden de aprehensión abandonen el país.

“Estamos ejerciendo nuestra soberanía y hemos tomado las previsiones necesarias para que los dispositivos de seguridad rastreen y detecten inmediatamente cualquier ayuda, complicidad, para coadyuvar a que los fugitivos abandonen el país. Eso no lo vamos a permitir", dijo, según un reporte de Gigavisión.

Respecto a la preocupación que expresó la Cancillería mexicana sobre una "presencia excesiva" de servicios de inteligencia y seguridad boliviana que vigilan tanto la sede diplomática como la residencia del embajador mexicano en el país, Santamaría señaló que esa intranquilidad no tiene fundamento, pues Bolivia cumple, dijo, lo establecido en el Convenio de Viena.

“Ellos tienen soberanía sobre la embajada, en el resto del territorio es Bolivia la que decide lo que hace (…) El operativo de seguridad obedece a dar cumplimiento a requerimientos judiciales”, añadió la autoridad.

Agregó que la misión de las autoridades es “garantizar que quienes han sido llamados por la ley sean puestos a disposición de la autoridad jurisdiccional cuando corresponda”.

Se conoce que se resguardan en instalaciones diplomáticas de México, entre otros, los exministros de la Presidencia, Juan Ramón Quintana y Wilma Alanoca, contra quienes existe una orden de aprehensión.

Esta mañana, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este viernes que disminuyó significativamente la situación de "vigilancia extrema" en la Embajada de su país en Bolivia.

"Tengo noticias de que se aminoró considerablemente esta situación de vigilancia extrema en nuestra Embajada en Bolivia", expresó el mandatario en su rueda de prensa diaria.