Carla Ascarrunz, abogada del exgerente de la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (Entel) Óscar Coca, señaló que su cliente se encuentra en Argentina desde el 12 de noviembre de 2019 y que solicitó refugio en el país vecino debido a que teme ser encarcelado si vuelve a Bolivia.

“Él (Coca) no tiene nada que ocultar, está en Argentina y ha solicitado su condición de refugiado, pero hasta que no se revierta la orden de aprehensión en su contra no se presentará a declarar por la denuncia de uso indebido de influencias y contratos lesivos al Estado”, manifestó la jurista.

Aclaró que Coca fue acusado de causar un daño económico de al menos 1.700 millones de bolivianos por conexiones de internet en 2006, pero que no tendría ninguna relación con ese hecho, ya que estuvo a cargo de la empresa estatal a partir de 2013.

“Es ilegal la orden de aprehensión y debe ser citado por el Ministerio Público para declarar en la oficina que corresponde”, remarcó.

El viernes por la tarde, efectivos policiales y personal del Ministerio Público allanaron tres viviendas de propiedad de Coca: dos en La Paz y una en Cochabamba. De los tres inmuebles colectaron documentos y discos compactos que fueron entregados a los peritos para que analicen la información que contienen.

El fiscal Germán Rea confirmó que existe la notificación azul contra Coca con el fin de que Interpol pueda dar con su ubicación para citarlo y que venga a Bolivia a declarar.