En las últimas horas, el actual ministro de Gobierno, Arturo Murillo, y el expresidente Evo Morales polemizaron sobre el narcotráfico en Bolivia.

El primero en referirse al respecto fue Morales, quien señaló que “resulta sospechoso” que en “en solo 3 meses aparezcan en Bolivia 9 carteles de droga”.i

“Resulta sospechoso que en solo 3 meses aparezcan en Bolivia 9 cárteles de droga, incluido uno ruso, según dice gobierno de facto sin dar pruebas”, señaló.

Incluso, Morales hizo referencia al “narcojet” detenido en México, que estaba conducido por dos pilotos bolivianos y presuntamente, incluso, habría cargado combustible en el país.

“¿No será una cortina de humo ante la inexplicable licencia con la que vuelan avionetas desde algunos lugares del Beni hacia México?”, agregó Morales.

No obstante, la respuesta de Murillo no se dejó esperar y respondió a Morales que lo que realmente resulta sospechoso es que “en 4 meses se incaute más droga, se procesen más narcotraficantes y se descubran sus nexos con la política que en los 14 años de Evo Morales”.

“La cortina de humo era la lucha contra el narcotráfico del MAS”, agregó el Ministro de Gobierno.

El pasado viernes, cabe recordar, la presidenta del Estado, Jeanine Añez, reveló el viernes que grupos del narcotráfico internacional operan en Bolivia y aseguró que su Gobierno, a diferencia del anterior, lleva adelante una “lucha frontal” contra esas organizaciones delictivas.

Durante el acto del lanzamiento oficial de la estrategia "Unidos, libres de drogas", que se efectuó en predios del Consejo Nacional de Lucha contra el Tráfico Ilícito de Drogas (CONALTID) en Santa Cruz, Añez señaló que en el país operan grupos de narcotráfico provenientes de Brasil, México y Perú, entre otros.

Mencionó que hay datos de inteligencia policial nacional e internacional que revelan la presencia de grupos criminales como el Primer Comando de la Capital o el Comando Vermelho de Brasil, cárteles de Sinaloa y Los Zetas de México, Sendero Luminoso de Perú, mafias rusas e incluso elementos residuales de grupos paramilitares como las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC) de Colombia.