En conferencia de prensa, y a la cabeza de Gerardo García, la dirigencia “evista” del Movimiento al Socialismo (MAS) ratificó que el Congreso de esa organización política se desarrollará en Lauca Ñ, en el Trópico de Cochabamba, y descartó cualquier posibilidad de cambiar la sede.

García, entre sus argumentos, señaló que en Lauca Ñ hay “más garantías” para desarrollar el Congreso ya que es en ese lugar donde hay más gente del MAS.

Aseguró que en las últimas elecciones, el binomio del MAS conformado por Luis Arce y David Choquehuanca obtuvo el 97% de apoyo en ese municipio, más que en cualquier otro del país.

Según García, la ratificación de Lauca Ñ como sede del Congreso se da después de una “reunión extraordinaria” de los nueve dirigentes departamentales del MAS, que se desarrolló este viernes, aunque en ausencia de algunas organizaciones afines al partido, como la COB  y el Pacto de Unidad.

Así, la dirigencia del MAS hizo caso omiso a los sectores que pedían que el Congreso se realice en la ciudad de El Alto.

García, en ese sentido, advirtió que la realización de cualquier otro Congreso sería ilegal, ya que solo puede ser convocado por la dirigencia del MAS y no dirigentes de organizaciones sociales.

“Aquellos resentidos no tienen ni voz ni voto, no tienen derecho de ellos poder convocar a un Congreso a nombre de la dirigencia nacional del MAS, totalmente ilegal (…) Nuestras autoridades que han sido elegidos no pueden prestarse a ese tipo de juegos, ellos han entrado a ser diputados, senadores, nuestros presidente, vicepresidente gracias al Instrumento Político”, señaló.

Sobre el presidente Luis Arce, afirmó que no tiene un liderazgo orgánico y aseguró que “todos admiramos a nuestro hermano Evo Morales”.

Afirmó que Luis Arce fue elegido como candidato por Morales y sentenció que cualquier otra persona que hubiera sido elegida por Evo “igual hubiera ganado”.

Finalmente, la dirigencia del MAS también rechazó los “ataques” contra su líder, Evo Morales, sobre todo en las redes sociales, y advirtió con iniciar procesos legales contra “quienes estructuran esos ataques”.