La Fiscalía pide 20 años de cárcel para Zúñiga y principales implicados en la asonada golpista del 26-J
“El Ministerio Público está solicitando la pena máxima para estos señores, que vendrían a ser 22 ciudadanos que ahora se encuentran en libertad y acusados. Debemos tomar en cuenta que la pena máxima por el delito de terrorismo es de 20 años de presidio”, informó el fiscal departamental de La Paz, Carlos Tórrez, en conferencia de prensa.

El Ministerio Público pide que el excomandante del Ejército, Juan José Zúñiga, sea sentenciado a 20 años de cárcel por el caso de la asonada golpista del 26 de junio del 2024. La acusación formal alcanza a 22 personas.
“El Ministerio Público está solicitando la pena máxima para estos señores, que vendrían a ser 22 ciudadanos que ahora se encuentran en libertad y acusados. Debemos tomar en cuenta que la pena máxima por el delito de terrorismo es de 20 años de presidio”, informó el fiscal departamental de La Paz, Carlos Tórrez, en conferencia de prensa.
la Fiscalía acusó formalmente a 21 personas. Entre ellas, 17 figuran en calidad de autores por los delitos de terrorismo, alzamientos armados contra la seguridad y soberanía del Estado y resoluciones contrarias a la constitución y las leyes; mientras que el resto aparece en grado de complicidad.
Entre los principales acusados se encuentra Zúñiga que era comandante del Ejército, además de los excomandantes de la Armada y al Fuerza Aérea, Juan Arnez y Marcelo Zegarra, respectivamente. Asimismo, aparecen en la lista otros mandos y personal que participó de la toma de la plaza Murillo del 26 de junio.
En la acusación, la Fiscalía solicita a la justicia que se abre el Juicio Oral y se dicte Sentencia Condenatoria contra los acusados, más el pago expreso de costas, daños, perjuicios a favor del Estado, además de los días multa según el Código Penal.
El 26-J
El 26 de junio, el excomandante del Ejército, Juan José Zúñiga, movilizó a un grupo de militares encapuchados con quienes tomó la plaza Murillo con tanquetas y efectivos con armas de grueso calibre.
En uno de esos blindados estaba Zúñiga, que un día antes fue informado de su relevo, además de Juan Arnez, de la Armada Boliviana, y Marcelo Zegarra, de la Fuerza Aérea Boliviana; sin embargo, este último “había hecho conocer que no estaba de acuerdo” con este accionar, según las investigaciones de la Fiscalía.
El Gobierno afirma que lo ocurrido el 26 de junio fue un fallido intento de Golpe de Estado. Ese día, de hecho, Zúñiga habló de que el Ejército buscaba “recuperar la patria” y habló de formar un nuevo gabinete.
Según las investigaciones incluso tenía preparado un discurso para asumir la presidencia del Estado.
Tras un careo con el excomandante del Ejército, el presidente Luis Arce optó por posesionar a un nuevo alto mando militar, mismo que ordenó el repliegue de las unidades a sus cuarteles, con lo que finalizó los momentos de tensión en el centro político del país.