Cuba, no obstante, deja en claro que no renuncia a la titularidad de la propiedad de la Clínica del Colaborador. El pasado martes, por instrucción de la presidenta Jeanine Añez, el Gobierno anunció la intervención de la clínica cubana para que esa estructura sea habilitada para atender al personal de salud que se haya infectado con el Covid-19.