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“Totalmente frustrado con el desastre del Siles esta noche. La gente tiene todo el derecho de renegar. Errores + errores. Este resultado es culpa nuestra: los dos goles en contra fueron errores infantiles. Y arriba deberíamos haber marcado por lo menos 4 goles” (sic), señaló Claure tras el empate de la Academia paceña con el Atlético Mineiro en La Paz (2-2) por la ida de los cuartos de final de la Sudamericana.

Ahora, el objetivo de la Verde es mejorar esa clasificación de cara al repechaje y, así, buscar pasar directamente a la final” de esa llave que se jugará en marzo.

Sampaoli es un conocido militante de la izquierda. De hecho, cuando dirigió a la Selección argentina tuvo una diferencia con Lionel Messi por ese tema, cuando trató de exigir al capitán albiceleste saltar a la cancha con un cartel político.

Bolívar logró revertir un 0-2 en contra y con un hombre menos - tuvo dos penales y falló uno-; sin embargo, en cuartos de final de la Sudamericana ganar en casa es una obligación y la Academia no cumplió con ese objetivo.

El cochabambino reemplaza en el cargo a Rosana Gómez, quien fue cesada del cargo tras la discreta participación de la Verde femenina en la Copa América de Ecuador.

“En La Paz todo sucede rápido para asfixiar al rival. Esa es la táctica. Es muy difícil jugar en La Paz; no hay adaptación. La verdadera adaptación llega después de pasar 20 días allí preparándose para un partido”, subrayó Antonio Carlos Zago, quien fue director técnico de Bolívar, The Strongest y hasta la Selección boliviana de fútbol.

En la misiva, el presidente de The Strongest, Daniel Terrazas, le comunica al jefe de Estado, Luis Arce, que el club atigrado quiere “realizar una entrega institucional de carácter simbólico”, al reconocerlo como “hincha del equipo”, además de “dialogar sobre otros temas vinculados con el trabajo y proyecciones” de interés de The Strongest.

“Si él se lo propone para mí llegaría al repechaje, siempre fue profesional (…) Eso pasa más por una decisión de él, es difícil que podamos opinar. Si él agarra club, vuelve a entrenar y todo seguramente lo van a considerar”, aseveró el arquero de la Verde.

El 'Diablo' aseveró que cualquier jugador tiene que ganarse su convocatoria a la Selección y no llega a representar al país solo por “pedido”.

En primera instancia, el Tigre fue sancionado con la obligación de jugar seis partidos de local sin público y el pago de 75 salarios mínimos (205.250 bolivianos); sin embargo, tras la apelación se decidió que los de Achumani solo jueguen un partido a puertas cerradas – que ya cumplió en el triunfo ante San José- y solo pague 10 salarios mínimos (Bs 27.500).