Bolívar no pudo con sus demonios, dejó una pobre imagen y perdió ante el Deportivo Cali en La Paz(1-2), resultado con el que se queda tempranamente eliminado de la Sudamericana.

Nuevamente fue un mal partido de la Academia, aunque inició con ímpetu, se fue apagando poco a poco. De hecho, solo los primeros 20 minutos fueron de dominio local. Después, la visita se acomodó en la cancha y fue el claro dominador psicológico del encuentro.

Sin tocar mucho la pelota, el Cali generaba más peligro que la Academia. De hecho, falló dos mano a mano y cada vez que lograba cruzar la mitad de la cancha con pelota dominada desnudaba todas las falencias defensivas celestes.

Bolívar no tenía forma de controlar los ataques de Cali, que se defendía cerca de su área y salía en rápidos contragolpes orquestados a tres toques. En una de esas jugadas llegaría la que cambió el partido. Mosquera aceleró, le ganó en velocidad a Pedraza y el defensa lo derribó al borde del área. El árbitro decidió que era jugada manifiesta de gol y expulsó al académico.

Si con 11 era difícil, con 10 fue casi imposible. Bolívar no pudo generar jugadas de peligro y daba la sensación de que el Cali podía anotar en cualquier momento y así fue.

Murillo encontró los espacios y con un fuerte remate cruzado puso en ventaja al equipo ‘azucarero’ (73’).

La serie estaba liquidada. Bolívar tenía que hacer 6 goles en 15 minutos, algo imposible por cómo se dio el partido.

Aun así, Callejón anotó el empate a los 80 minutos, aprovechando la única ocasión en la que la defensa colombiana quedó descompensada.

Empero, cuando todo hacía suponer que el partido terminaba en empate, una mano de Flores en el área fue sancionada con la pena máxima.

Benedetti se hizo cargo y anotó el gol del triunfo para el cuadro colombiano, que avanza de fase y deja con muchas dudas a una Academia desorientada y en crisis.