La presidenta de la Agencia de Medio Ambiente de Cuba, Maritza García, anunció ayer que un grupo de expertos iniciaron la evaluación de los daños causados por el paso del huracán Irma en la diversidad biológica de la isla.

En su trayectoria por Cuba, Irma azotó fuertemente el territorio, por lo que investigadores locales comenzaron con las exploraciones en la isla, con el fin de determinar los daños en áreas marinas y costeras.

El paso del huracán por la isla inició desde el pasado jueves hasta el domingo y causó la muerte de diez personas, así como daños en el servicio eléctrico, telefónico y en diferentes infraestructuras, como hoteles, viviendas, entre otras.

García adelantó que los especialistas en las provincias, junto a institutos y grupos de estudio, respaldarán las investigaciones próximamente.

Asimismo, señaló que los macizos que cubren un alto porcentaje de la biodiversidad terrestre permanecieron fuera de la trayectoria de Irma, que estuvo acompañada de fuertes lluvias, oleaje y ráfagas de viento que oscilaron alrededor de los 250 kilómetros por hora.

Según evaluaciones preliminares, las inundaciones asociadas al huracán fueron las más severas ocurridas en el litoral de Cuba. El huracán rodeó a la isla de oriente a occidente, por lo que las costas fueron sacudidas.

La reserva de la biosfera Buenavista, una de las joyas de Cuba ubicada en el norteño archipiélago Sabana-Camagüey, estuvo en la ruta de Irma. Esta reserva cuenta con 873 especies y resalta por sus escenas y riqueza natural.