El Gobierno de Chile espera que el papa Francisco se abstenga de mencionar el tema de la demanda marítima de Bolivia durante su visita a aquel país del 15 al 18 de enero, según explicó el embajador chileno ante la Santa Sede, Mariano Fernández.

"El gobierno de Chile pide a toda persona que se abstenga de opinar hasta que se pronuncie el tribunal de La Haya", un fallo que saldrá a finales del 2018, aseguró Fernández en contacto con la prensa.

“Eso lo pedimos no sólo al Papa sino a toda persona, a los amigos, a la opinión pública, que no se pronuncien hasta el fallo, que cumpliremos rigurosamente, sea cual sea", agregó el diplomático, que estuvo a cargo por diez años del diálogo con Bolivia.

En 2013, el Gobierno de Evo Morales demandó a Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de la Haya para poder tener una salida al Océano Pacífico, que perdió en una guerra en el siglo XIX.

El embajador chileno ante la Santa Sede explicó que cualquier tipo de declaración se puede “distorsionar” como “se distorsiona al Papa y a otras personas”.

Fernández explicó que en el Vaticano “hay una perfecta comprensión del tema” y prueba de ello es que desde que el Papa habló en su viaje a Bolivia en 2015 de la demanda marítima, la Santa Sede no se ha vuelto a referir a ello.

Jorge Bergoglio, en su discurso a la sociedad civil en la Catedral de La Paz en julio de 2015, emplazó al diálogo para “evitar conflictos con los países hermanos” y añadió: “Estoy pensando en el mar. Diálogo, diálogo”.

Esas palabras no sentaron bien en algunos sectores de Chile al considerar que el diálogo concluyó en el momento en el que el tema ha pasado a los jueces de La Haya.

El Papa Francisco viajará del 15 al 18 de enero a Chile para después trasladarse a Perú, desde el 19 al 21 de enero, en el que será su quinto viaje a Latinoamérica.