El candidato a la presidencia por Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, aseguró hoy que su esa alianza política tiene “pruebas importantes” que probarían que hubo un fraude electoral en las elecciones generales del pasado 20 de octubre, pero no las presentará ante la Organización de Estados Americanos (OEA), instancia que realiza una auditoría del proceso electoral boliviano.

“Tenemos una cantidad importante de pruebas del fraude, pero como estamos en contra de la auditoria, lo que promovemos es la presentación ciudadana de todas las pruebas que ratifiquen lae existencia de  fraude”, aseguró en conferencia de prensa.

Para Mesa, participar de la auditoría de la OEA sería caer en la trampa del Gobierno y reiteró que el pedido de CC es que haya nuevas elecciones con un nuevo Tribunal Supremo Electoral (TSE).

No obstante, señaló también que todas las personas y/o instituciones que estén vinculadas con la defensa del voto deben presentar sus pruebas debidamente respaldadas.

Las palabras de Mesa llegan un día después de que la OEA convocó a la ciudadanía a hacer llegar su material del supuesto fraude para continuar con su auditoría y pocas horas después de que el expresidente Jorge Quiroga le haya pedido entregar las pruebas que tiene a este organismo internacional.

Por otro lado, Mesa se refirió a lo sucedido durante la madrugada del martes en el aeropuerto de El Alto, cuando afines al Gobierno cercaron al presidente del comité cívico de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho. A tiempo de expresar su solidaridad con el líder cívico, señaló que lo sucedido fue un hecho decidido por el oficialismo “contradiciendo la falsa acción de un discurso mentiroso de parte de (Evo) Morales”.

Agregó que el Gobierno y sus militantes están promoviendo una falsa división racista y un falso discurso de paz.

“Evo Morales lleva varios días que busca la pacificación y que propone que haya un desarme de partes y que plantea que se establezca una línea de hermandad y de no racismo, pero eso no está ocurriendo, sino que los militantes del MAS, enviados por el Gobierno, están generando acciones de violencia y están ocasionado de manera explícita una falsa división racista que no existe en Bolivia”, aseguró Mesa.