La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) emitió un comunicado en el que realiza un llamado urgente a deponer las actitudes violentas en el país, un días después de que cinco cocaleros murieran en Cochabamba producto de enfrentamientos con la policía y las Fuerzas Armadas.

“Una vez más, condenamos estos hechos y hacemos un urgente llamado a deponer actitudes de violencia. La vida es un gran don de Dios y no podemos disponer de ella. Nadie es dueño de la vida”, señala el comunicado de la CEB.

En ese sentido, la Iglesia llamó al Gobierno Nacional a deponer actitudes de violencia excesiva contra los sectores movilizados y a esclarecer rápidamente las responsabilidades de todas las muertes acaecidas en estas tres semanas.

Asimismo, exhortó a los movimientos sociales a manifestar sus demandas sin violencia y sin amenazas a la vida de los demás y “a los que tienen autoridad sobre los grupos movilizados les llamamos a la responsabilidad con el país y a promover actitudes pacíficas”.

“Llamamos a todos a dar señales de disponibilidad para resolver, a través del diálogo, las diferencias que nos dividen. Los bolivianos debemos ser capaces de consensuar unas nuevas elecciones libres para que el pueblo decida su futuro, en condiciones de transparencia y confianza, y en un verdadero espíritu de respeto a todos”, acotó la Iglesia.