El ministro de Gobierno, Arturo Murillo, confirmó este martes que la madre de la víctima de la joven violada en el denominado caso la “manada” en Santa Cruz, trabaja en la Dirección de Migración y tildó al diputado Felipe Dorado como un “canalla y poco hombre”, por denunciar un supuesto tráfico de influencias.

Dorado denunció hace días un supuesto uso de influencias en la contratación de la progenitora de la adolescente que sufrió una violación grupal en la capital cruceña, y aseguró que al trabajar en esta institución se “presionó a jueces y fiscales” para favorecerla en el proceso legal por el delito cometido.

“Me parece una canallada aquello, me parece ser muy poco hombre, revictimizar a una víctima. Efectivamente la madre de la niña que fue violada en el caso manada trabaja en Migración. Le hemos dado trabajo, ¿es un pecado aquello?”, cuestionó Murillo, según una nota de prensa del Ministerio de Gobierno.

Agregó que como Ministro decidió ayudar a la mujer, de quien dijo es víctima de “un poder económico”.

“Esta señora ha sido víctima de un poder económico en Santa Cruz, la han perseguido, la han amenazado, la han cuestionado porque había poderes económicos por detrás; que lamentable que exista una persona que ha sido elegida por el pueblo que ande señalando a una mujer, ¿no tendrá madre este señor?, ¿no tendrá hijas este señor? Me parece una cobardía, no revictimicen a la gente cuando era senador ayude a esta gente, cuando fui ministro acudió a mí y la volví ayudar, y seguiré ayudando a las personas que necesiten de mí, y si eso está mal júzguenme mi trabajo es ayudar soy un funcionario Público”, concluyó.

En este polémico caso están implicados cinco jóvenes que habrían abusado sexualmente de una joven en un motel ubicado en el sexto anillo de la zona norte de la ciudad de Santa Cruz.