La Cámara de Diputados sancionó en las últimas horas la Ley que crea el impuesto a las grandes fortunas y remitió la norma al Ejecutivo para su respectiva promulgación.

Así, Bolivia se une a países como Argentina, Rusia y España, que ajustaron su legislación como parte de las medidas económicas para amortizar los efectos de la pandemia.

El Pleno de la Cámara de Diputados finalmente aprobó el proyecto de ley que, en su ámbito general, establece un nuevo gravamen para las personas naturales que posean más de 30 millones de bolivianos de patrimonio.

Tras el tratamiento del proyecto de ley en la Cámara de Senadores, la propuesta legislativa fue devuelta a la Cámara Baja sugiriendo modificaciones, por lo que el Pleno realizó el tratamiento correspondiente logrando aprobar los cambios sugeridos.

En ese sentido, la propuesta legislativa establece, entre los cambios, que aplicará de manera permanente a partir del 2020 y alcanzará a más de 150 personas identificadas que tienen fortunas -cada una- mayor a 30 millones de bolivianos, logrando una recaudación de hasta 110 millones de bolivianos que pasarán a las arcas del Estado. El impuesto aplicará a personas naturales que hayan acumulado su fortuna al 31 de diciembre de cada año.

“Una observación en Cámara Alta relacionado principalmente con este tema, de los años que tenía, que establecía la ley inicial (…) se cobrará de manera indefinida el impuesto a las grandes fortunas. Entonces esto se ha aprobado (…) hubo algunos que no estaban de acuerdo, pero estamos en democracia”, remarcó el presidente de la Cámara de Diputados, Freddy Mamani, tras la conclusión de la sesión.