Gente

En El Alto, La Paz y Santa Cruz, el Santo Padre habló de mar, de la justicia social, de la vida sacerdotal y de su necesidad de que la gente rece por él, entre otras frases que rompieron el protocolo.

El responsable regional de Defensa Civil, Ramiro Mercado, ese hecho fue verificado por técnicos de Defensa Civil y la Unidad de Gestión de Riesgos (UGR) después de una evaluación.

El presidente Evo Morales; el gobernador de Santa Cruz, Rubén Costas, el canciller David Choquehuanca, entre otros despidieron al Vicario de Cristo en el aeropuerto internacional de Viru- Viru de la capital oriental.

Morales entregó el crucifijo al Santo Padre el miércoles, en Palacio de Gobierno, en La Paz, en el primer día de su visita a Bolivia, hecho que fue criticado en distintas esferas de la sociedad por mezclar la simbología comunista con la cristiana.

Ante cientos de reclusos encerrados en el penal de Palmasola y representantes de otras penitenciarías, el Papa Francisco se mostró humilde y no dudó en abrazar y bendecir a los niños que viven junto a sus padres. "No podía dejar Bolivia sin venir a verlos. Sin dejar de compartir la fe y la esperanza que nace del amor entregado en la cruz. Gracias por recibirme. Sé que se han preparado y rezado por mí", declaró el Pontífice.

Como sucedió en su estadía en Santa Cruz, al este de Bolivia, miles de personas estuvieron pendientes del recorrido del sumo Pontífice y lo esperaron en la puerta del reclusorio para saludarlo y pedir su bendición.

El Papa Francisco llegó hace unos minutos a la cárcel de Palmasola, donde cumplirá su última actividad antes de dirigirse a Paraguay, el último país de su primera gira por Sudamérica. Francisco hablará y escuchará a los reos, entre ellos a representantes de otras penitenciarías, pero los del caso Rózsa, también llamado caso Terrorismo, no podrán verle porque han sido llevados a la sección Chonchocorito.

Pidió a los indígenas, las personas sin techo, los migrantes perseguidos, los desempleados, los niños explotados, las víctimas de la inseguridad, entre muchos otros a que “no se achiquen” para lograr los cambios históricos en el mundo en busca de justicia social.

El mensaje fue dado a conocer ante cientos de delegados internacionales que se dieron cita en el campo de la Expocruz.

Francisco recibió el regaló luego de una reunión de 48 minutos con el Jefe de Estado en Palacio de Gobierno y después de rendir un homenaje a Espinal, quien perdió la vida a manos de paramilitares ante sus cuestionamientos a la violencia política.